Las puertas de madera son elementos esenciales de todo espacio doméstico o de trabajo, ya que brindan seguridad y a la misma vez un atractivo al lugar; por tal motivo, es esencial conocer cómo realizar una adecuada limpieza de las mismas, garantizando su buen funcionamiento.
Antes de hacer la limpieza de puertas, es primordial conocer el tipo y uso de cada puerta de madera, para así, dar un mejor cuidado y saber limpiarlas correctamente. Además, debes evitar ciertos errores que son muy comunes pues siempre las más olvidadas en el hogar son las puertas.
Algunos errores que solemos cometer son usar el plumero como elemento único de limpieza. Este lo que hace es esparcir el polvo, comenzar la limpieza con las puertas y luego hacer el resto, eso es terrible porque puede que las salpiques y no servirá de nada su limpieza previa. Olvidar las manillas, pomos y marcos, fatal, estos acumulan la mayor cantidad de gérmenes y bacterias. Hay que secar la puerta después de limpiarla, esto solo afectará tu puerta, pues la humedad es el mayor enemigo de la madera.
Para evitar que sigas cometiendo estos errores en la limpieza de las puertas de madera, te vamos a explicar los pasos básicos a seguir para que establezcas una rutina de limpieza:
- Limpia tus puertas cada 15 días, dedícale tiempo, no dejes pasar más tiempo de este pues se acumula mayor suciedad y eso podría afectarlas irremediablemente, deteriorándolas.
- Comienza por el plumero si quieres, pero luego debes pasar un paño de microfibra o algodón con agua y jabón neutro para realizar esta limpieza, este paso evítalo si la puerta es lacada o tiene pintura especial, para esas es mejor usar productos diseñados específicamente para conservarlas.
- Una vez a la semana mínimo, debes limpiar las manillas y los marcos, necesitan mayor limpieza por estar más en contacto con las manos, por tanto, acumulan mayor cantidad de gérmenes. Pero ten cuidado con el material de las manillas, dependiendo de este deberás comprar un desinfectante más específico.
¿Cómo limpiar puertas de madera barnizadas?
Las puertas de madera barnizadas, necesitan un cuidado especial porque son más delicadas que las puertas de madera convencionales, por lo cual, mantener su estética es sencillo, siempre y cuando se realice el mantenimiento adecuado. Es por esto que a continuación te dejamos los pasos que debes seguir para su limpieza, cuidado y mantenimiento, para que así puedas hacerlo correctamente indiferentemente de que sea una puerta de exterior o interior.
Quitar el polvo
Aunque no lo creas, las puertas de madera barnizadas son otro objeto que acumula polvo y telarañas, si pasas el plumero frecuentemente puedes eliminar esa suciedad, pero si por el contrario la puerta lleva tiempo sin limpiarse entonces vas a necesitar algo más, como un trapo seco, pásalo por toda la superficie, incluyendo costados y marcos. Esta simple acción mantendrá alejados los insectos y arácnidos de tu puerta por un tiempo.
Limpiar la puerta
Por lo general se usa agua y jabón neutro en la limpieza de las puertas de madera barnizadas, basta con que mojes un trapo limpio y frotes la superficie de la puerta, luego enjuágala antes de secarla. Si la puerta está muy sucia deberás usar otros productos que actúen correctamente sobre la suciedad acumulada.
Para esto puedes recurrir al vinagre blanco y el aceite, los puedes mezclar con agua, frota la puerta muy bien y déjalos actuar por 30 minutos, luego seca directamente la puerta. También, puedes usar el alcohol o un disolvente universal para limpieza, ponlos sobre el trapo y luego pásalo por la puerta siguiendo la veta de la madera, así lograrás los mejores resultados.
Actuar sobre las manchas
Si tu puerta tiene manchas puede que estas necesiten un proceso específico dependiendo de que sean las manchas. En caso de que las manchas sean de grasa, primero retira el polvo de toda la puerta y luego aplica talco sobre cada mancha cubriéndolas muy bien, déjalo actuar unos minutos y luego pasa un trapo húmedo con una mezcla de agua y jabón.
Si, por el contrario, la causa de tus manchas son rayones de bolígrafos o rotuladores que resultaron de una obra de arte de tu niño pequeño, puedes recurrir al alcohol desnaturalizado que funcionará como decolorante, pero no será suficiente para retirar por completo las manchas de tu puerta de madera barnizada.
Así que quizás tendrás que quitar el barniz usando una lija para toda la superficie, o aplicando algún decapante químico para quitar pinturas, en caso de decidir usar este último asegúrate de que trabajas en una habitación bien ventilada y con equipo de protección personal.
Secar la puerta
Este paso es fundamental en la limpieza de las puertas barnizadas, pues un exceso de humedad puede contribuir a corroer el material y favorecer la aparición de hongos y moho, deteriorando la puerta. Para secar la madera debes usar un trapo húmedo también en el sentido de las marcas, así obtendrás óptimos resultados.
Cómo Limpiar puertas de madera barnizadas de interior
Para limpiar tus puertas no es necesario que el proceso sea complicado, podemos lograr buenos resultados y hacerlo de la forma correcta evitando daños a la puerta teniendo cuidado en usar los productos adecuados y la técnica correcta para limpiar. Es por esto que te dejamos el paso a paso para que hagas una buena limpieza de puertas de madera barnizadas de interior, dependiendo de la necesidad, es decir, si no están muy sucias o si tienen mucho sucio acumulado.
- Limpieza de puertas de madera barnizadas de interior cuando no están muy sucias:
Esto es lo más común, pues por estar en el interior no suelen acumular mucho sucio, pero puede que dependiendo del uso que tengan y la ubicación dentro de la casa entonces necesiten limpiezas con más o menos frecuencia.
- Consigue una gamuza suave o un plumero y pásalo por la puerta para retirar todo el polvo que pueda tener acumulado, este paso hazlo con regularidad para evitar que la puerta esté muy sucia y requiera limpiezas más profundas.
- Ahora humedece una gamuza suave con agua tibia, no debe estar empapada. Llena un cubo con agua tibia y colócale jabón natural, de lagarto o con base de aceite. Humedece la esponja en esa agua con jabón y restriega toda la superficie de la puerta. Termina humedeciendo la gamuza en agua tibia limpia y pasándola por toda la superficie para retirar el jabón.
- No te olvides de los costados de la puerta, pasa la gamuza humedecida y si tiene mucha suciedad entonces puedes usar una esponja humedecida por agua y jabón natural. Si usas la segunda opción, entonces luego pasa un paño húmedo para quitar lo que quede de jabón.

- Limpieza de puertas de madera barnizadas de interior cuando tienen más suciedad acumulada:
En caso de que no limpies tus puertas de madera barnizada de interiores con frecuencia, entonces necesitarás recurrir a otros métodos de limpieza para que queden impecables:
- Limpieza profunda: humedece un paño con agua tibia y llena un cubo con agua caliente y allí diluye un poco de jabón natural, añade vinagre en la proporción de 1 parte de vinagre por cada 3 de agua. Humedece una esponja suave con esa mezcla y con eso vas a limpiar toda la superficie. Luego pasa un paño humedecido con agua limpia para retirar cualquier resto de la mezcla, no lo dejes secar sin retirar la mezcla, restriega la superficie e inmediatamente pasa a retirarlo con agua limpia. Haz lo mismo por los largueros y travesaños de la puerta, si la limpieza requiere mayor profundidad entonces puedes añadir a la mezcla bicarbonato.
- Eliminar manchas que hayan quedado luego de la limpieza básica: este tipo de manchas por lo general son causadas por algún tipo de roce, rayones hechos por los niños con bolígrafos o rotuladores.
- Limpiar con una mezcla de agua, aceite y vinagre: que es poco agresiva. Antes de aplicar esta mezcla debes retirar el polvo con un paño suave humedecido. La mezcla puedes prepararla en un cubo agregando tres partes de agua, una de aceite y media de vinagre. Humedece una esponja o paño suave en la mezcla y pásalo por toda la superficie de la puerta, frotando en la dirección de la veta de madera. Deja actuar la mezcla sobre la puerta por 30 minutos, luego retira en la dirección de la veta con un paño o gamuza suave.
- Limpiar con alcohol: este producto si es agresivo, por eso debes hacerlo con cuidado para no dañar la puerta. Aplícalo con discos de algodón gruesos, humedécelos con el alcohol y frota las manchas de la puerta siguiendo la dirección de la veta de la madera, evita en todo momento apretar porque podrías dañar el barniz.
- Limpiar con cera para muebles: este es un producto de gran calidad y te ayudara a restaurar la puerta si has usado alcohol en varios lugares de la puerta, compra cera líquida para muebles así le darás un acabado magnífico. Primero haz la limpieza básica para dejar la puerta sin polvo, luego salpica unas gotas de cera sobre la puerta, solo unas pocas, y procede a frotar con ayuda de un paño o gamuza suave seco, siempre en la dirección de la veta. Con esto lograras desaparecer las manchas más rebeldes y además le habrás dado un brillo extra a tu puerta.
- Limpiar con artefactos de vapor a presión: este artefacto debe ser compacto o en su defecto contar con una manguera para que puedas realizar la limpieza fácilmente aplicando el vapor directamente sobre la superficie de la puerta. Ayúdate colocando el accesorio cepillo en el extremo del artefacto de vapor, o al final de la manguera, y ponle un poco de jabón natural, pásalo ligeramente sobre pequeños tramos de la superficie. Luego pasa un paño suave y seco para terminar de limpiar. Repite el proceso hasta terminar de limpiar toda la puerta incluyendo los travesaños y largueros.
Limpieza de puertas de madera muy sucias
A continuación, te vamos a detallar las diversas formas o métodos necesarios para limpiar puertas de madera con mucha suciedad, para que lo sepas hacer correctamente.
Limpieza en seco
Esta es la base de la limpieza de las puertas, y consiste en retirar el polvo, si la puerta no está muy sucia este será tu único paso, pero si tiene mucho sucio acumulado entonces este será tu primer paso. Para hacerlo usa un plumero o lo más recomendable es un paño de micro fibra o de algodón. Este paso debes hacerlo semanalmente para evitar que el sucio se acumule y así no se complique el mantenimiento de las puertas.
Primera limpieza con jabón neutro
Debes ser cuidadoso al elegir los productos y métodos de limpieza para tu puerta ya que la madera es un material muy delicado, si usas productos agresivos pueden dañar el barniz. Lo mejor es que uses jabón neutro líquido, agua, trapo y un paño seco.
Lo que debes hacer es mezclar en un cubo agua con un poco de jabón neutro, allí vas a humedecer el trapo y a escurrirlo bien, no debe chorrear agua, con el vas a limpiar toda la puerta y luego vas a secar con el paño para que no queden restos de jabón.
Amoniaco para eliminar toda la suciedad
Primeramente, debes tener en cuenta, que el amoniaco es un producto peligroso y dañino para la piel, por lo cual, es de vital importancia acudir a las medidas de seguridad necesarias, como guantes. Así mismo, abrir las ventanas del espacio donde vayas a trabajar o trabajar al aire libre, porque el olor es fuerte e intenso.
Recurre a este método si los dos anteriores no han sido suficientes, o ya has visto que tus puertas están muy sucias y requieren algo potente. Lo que tienes que hacer es colocarte unos guantes, posteriormente mezclar 1 vaso de amoniaco y 2 de agua en un cubo para así bajar la intensidad del producto, allí vas a humedecer un trapo y vas a escurrirlo bien, para luego limpiar la puerta y secar la superficie con un paño limpio.
Si lo deseas puedes usar una esponja muy suave en lugar de un trapo, pero no debes frotar, no es necesario, el producto es muy eficaz para quitar suciedad acumulada y las manchas sin necesidad de frotar. Pasa el trapo con el producto siempre en la dirección de las vetas, lo mismo para secar la madera.
Aceite y vinagre para nutrir la madera
Por su parte, sabemos que la madera es un material natural, por ende, necesita nutrición, lo cual logra mediante el uso de un producto graso, que adicionalmente le da brillo y limpieza. Para éste método usaremos aceite del cualquier tipo (oliva, girasol, entre otros), vinagre blanco puede ser de manzana, de vino blanco o de limpieza, un cubo, un trapo y un paño seco.
En el cubo vas a mezclar partes iguales de aceite y vinagre, si gustas puedes añadir un poco de agua, allí vas a mojar el trapo y luego vas pasarlo por toda la puerta, deja actuar por 30 minutos, y luego retira el excedente con un paño seco, verás que tu puerta brillará. Este método se recomienda para puertas sin barnizar, pero no hay problema con usarlo en puertas barnizadas y otros muebles de madera.
Jabón especial para madera con base grasa
Existen jabones diseñados especialmente para la madera, estos tienen una base oleosa que, por ende, permiten limpiar y nutrir la madera al mismo tiempo. Con este se unifican dos de los métodos que mencionamos anteriormente. Puedes adquirirlo en cualquier tienda o supermercado, y para aplicarlo debes seguir las instrucciones del fabricante. Generalmente solo tienes que disolver un poco de dicho jabón en agua, humedecer en esa mezcla un trapo, pasarlo por la puerta y luego secar con un paño limpio.
Limpieza de puerta de madera con grasa
Para finalizar el post hablaremos de cómo puedes realizar la limpieza de las puertas cuando se ha manchado de grasa, y los materiales que se necesitan para realizar la limpieza. Lo que vas a necesitar son polvos de talco y un paño.
Acto seguido vas a aplicar dichos polvos sobre la mancha de grasa, deja que lo absorba por 30 minutos, luego retira el producto con un trapo. Posteriormente haz una limpieza con jabón neutro para que así toda la superficie quede con buen acabado. En caso de no tener polvos de talco puedes usar alguna harina, puede ser de trigo, maíz o cualquier otra, estas tienen el mismo poder absorbente que los polvos y darán un resultado idéntico.
Como puedes ver hay muchas formas de limpiar puertas de madera, dependiendo de la cantidad de suciedad, su tipo, si la puerta está barnizada o no, entre otros factores, pero siempre es importante que realices, aunque sea una limpieza básica frecuentemente para así tener puertas con buen aspecto y que su mantenimiento sea sencillo siempre.